se acaba el año y decidimos juntarnos para despedirlo de manera especial, qué mejor manera de despedir un año que en compañía de amigos, de buenos amigos, gente que quieres y encima haciendo lo que más nos gusta, montar en moto.
Una vez en el punto de encuentro habitual nos tomamos un café bien calentito para quitarnos un poco el frío, aquella mañana hacía muchísimo y después del verano tan caluroso se notaba más el cambio, era un frío ártico, del que te deja las manos congeladas, moradas, sin tacto y que sólo los moteros conocemos como casi nadie.
Al llegar nos pusimos al día, mejor dicho, no paramos de hablar, estuvimos cascando una hora, con la excusa del frío no había quién levantara el culo del asiento jajajajajaja, cuando por fin conseguimos levantarnos nos pusimos en camino, hicimos una ruta impresionante hasta nuestra primera parada.
Una tienda motera ubicada en Badalona con unos precios de escándalo, todo baratísimo y de buena calidad, nos atendieron de miedo con comida, bebida y café.
«GUANTES, CAZADORAS, CALZADO, MALETAS…. INCREíBLES PRECIOS»
t ras esa parada nos fuimos al «muro», nosotros lo llamamos así, es una pared, un muro con unos grafitis impresionantes, pero hay uno en especial que nos gusta muchísimo porque refleja el espíritu de nuestro grupo así como el título de esta entrada, allí nos hicimos una fotitos con las nuevas generaciones que suben con pasión por las motos:
y Para finalizar nos fuimos a comer a «Cal Miguelon», qué decir, los que habéis estado sabéis cómo se come y todavía resulta mejor si estás en buena compañía. Mucha risa y mucho cariño, es la clave para pasar un día genial en la mejor compañía.
R esumiendo, un día único, con ganas de más, de más moto, más amigos, más risas y más comida, jajajajajaja. Os esperamos en la siguiente, seguro que será igual o mejor que esta.